sábado, 9 de abril de 2011
Por lo general, cuando un novio nos deja, sentimos un cambio abrupto e inesperado en nuestra vida, tanto FÍSICOS(como por ejemplo no tener apetito, no tener ganas de estudiar, de hacer el deporte que prácticamos, de salir con amigas) solo ganas de estar tiradas en una cama pensando en él. Como también cambios PSIQUICOS, una gran tristeza invade nuestra mente, nos sentimos culpables de que nos hayan abandonado, nos preguntamos en que fallamos nos imaginamos los momentos lindos que pasamos junto a él, y se nos retuercen las tripas de solo pensar que puede estar con “otra”. Es mas, nos negamos a creerlo, tratamos de autoconvencernos de que es algo pasajero, que no puede ser real y que el va a volver “desconfundido” a nosotras y todo volverá a ser como antes..